La rutina diaria, las prisas, el estrés…poco a poco nos vamos sumergiendo en una rueda de la que a veces cuesta salir…
Os confieso que llevo años metida en esa rueda, sin tiempo para casi nada, y menos, para mí y los míos.
Pero siempre hay un momento, más tarde o más temprano en el que, de repente, salta una chispa, una señal, que te hace frenar en seco y abrir los ojos. Generalmente viene en forma de sacudida y ahí es cuando paras, sales de ese «sitio» en el que llevabas tiempo y sobre el que tenías el control y empiezas a ver, observar, pensar, reflexionar, y darte cuenta que, a pesar de tener un trabajo precioso, que he tenido la suerte de elegir y de disfrutar, el tiempo vuela y las cosas realmente importantes son esas que no se pueden ni comprar ni ganar trabajando mucho.
Llevo 15 años prácticamente sin parar de trabajar, disfrutando de mi trabajo al máximo, exprimiendo mi mejor versión para dar lo mejor de mí en cada sesión. Siempre con una sonrisa, feliz por saberme afortunada…
A pesar de eso, y con la llegada del mes de Agosto, aprovecharé para cerrar por vacaciones. Cierro el estudio durante este mes, y cierro, además, el ruido mental, las prisas, y esa vocecita interior que constantemente me habla de crear nuevos decorados, nuevas campañas y nuevos proyectos.
Desconectaré prácticamente al 100% de redes para volver con más fuerza y cargada de energías renovadas para seguir creando los recuerdos más bonitos de todos vosotros.
Nos vemos en septiembre!, Feliz verano familia!!!